El primer paso, y el más importante, es tener claro qué tipo de semillas quieres usar para rellenar tu almohadilla, pues esto marcará la diferencia entre un cojín y otro. Para ello, existen infinidad de semillas que podrán serte útiles dependiendo de las sensaciones que quieras experimentar cuando uses tu almohadilla. Podrás utilizar semillas de trigo, de soja, de lino, garbanzos o incluso huesos de cereza, entre otros.
Así mismo, para darle un toque especial, te recomendamos rellenar tu almohadilla con algunas hierbas aromáticas, como la lavanda o el azahar, que desprenderán un fantástico aroma relajante cuando calientes la almohadilla y te ayudarán a conectar cuerpo y mente.
Por otro lado, una vez tengas claro el relleno de tu almohadilla, necesitarás tener a mano un buen trozo de tela de algodón que puedas introducir en el microondas. Utilizaremos la tela para crear el cojín que más tarde rellenaremos, por lo que puedes escoger la tela que más te guste y cortarla según la medida que desees. Te recomendamos que no sea demasiado grande para poder utilizarlo cómodamente en zonas más pequeñas e introducirlo fácilmente en el microondas.
Una vez cortada la tela, simplemente deberás ir cosiendo la almohadilla por los bordes dejando uno de ellos abierto, puesto que será el que usaremos para rellenar nuestro cojín con las semillas escogidas anteriormente. Una vez hayamos rellenado el cojín, podremos coser la apertura teniendo en cuenta que deberá quedar mullido, pero sin presión para poder usarlo correctamente.
En resumen, diremos que los pasos a seguir para crear tu almohadilla de semillas son los siguientes:
- Escoge las semillas que utilizarás: lino, trigo, soja, garbanzos, huesos de cereza…
- Escoge una planta aromática (opcional): lavanda, azahar, lúpulo…
- Escoge una tela de algodón que te guste y ten a mano tijeras, aguja e hilo (si no tienes máquina de coser)
- Corta la tela para hacer la almohadilla y cose los bordes por tres lados, dejando uno de ellos para rellenarla con las semillas
- Rellena con las semillas teniendo en cuenta que no debe haber presión
- Cose la apertura para que no salgan las semillas y listo, ¡ya tienes tu almohadilla!
Una vez tengamos nuestra almohadilla de semillas podremos utilizarla en cualquier zona. Para ello, recomendamos introducirla en el microondas durante 1 minuto aproximadamente y probar la temperatura en la zona a tratar, como el cuello o la zona del bajo vientre en caso de dolores menstruales. Si crees que necesita más calor, puedes ajustar el tiempo y la temperatura de tu microondas hasta alcanzar el punto deseado. Se recomienda no exceder los 5 minutos de calentamiento para evitar posibles quemaduras.
Así mismo, con estas almohadillas, además de tratar dolencias físicas de forma fácil, también podrás disfrutar de la llamada «aromaterapia», que te llevará a relajar cuerpo y mente, disminuirá los niveles de estrés acumulados durante el día y te ayudará a combatir el insomnio.
Ahora que ya sabes cómo hacer una almohadilla de semillas y en qué casos puedes utilizarla, solo te queda ponerte manos a la obra para tener tu almohadilla lista en cuestión de minutos. Con este tutorial, crear almohadas terapéuticas será un proceso sencillo que te permitirá trabajar tus dolores musculares y disfrutar de momentos relajantes desde casa y a tu ritmo.
¡Porque no hay nada como cuidar de uno mismo!